Hace un siglo ya, el dictador mexicano llamado Porfirio Díaz dijo una frase que ni él mismo se imaginó que nunca iba a perder vigencia: < “Pobre México: tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos” >.
Y mientras no ocurra alguna catástrofe natural en éste planeta, esta vecindad tan avecinada, parece que no va a cambiar así nomás por que a algún patriota libertario se le ocurra tratar de hacerlo por él mismo.
Pero también, mientras esto siga ocurriendo (Una vecindad que parece una relación carnal, dónde a México siempre le ha tocado estar abajo), se avizora como imposible que las cosas cambien en el futuro (A no ser que esto de la crisis del capitalismo, nos traiga noticias que nadie esperaría iban a suceder algún día, y el gigante se caiga como castillo de naipes baratos) por varias razones.
Una de ellas, es que el vecino en suerte, no es nada más, pero nada menos que el imperio de turno en éste mundo, hoy por hoy, y por casualidad (Como todos los otros imperios conocidos en éste planeta anteriores a éste) tiene la maña de no permitirle a nadie (Mientras pueda, y como pueda), a ningún otro país, progresar libremente hasta dónde su fuerza y su inteligencia le alcance, y mucho menos si ese país es africano, árabe, latinoamericano o asiático (Más o menos en ese orden, por raza, o mejor dicho por racismo).
Y que en el caso de México, parece que el imperio le ha fijado, establecido, una ley no escrita, que el nivel del agua (El progreso) le debe llegar hasta el labio bajo, o sea, no taparle la boca para que pueda comer lo necesario para no morir de hambre, y menos la nariz, por que moriría muy rápido asfixiado, y no podría trabajar toda su vida para enriquecer a dicho imperio.
Otra de las razones, es nuestro auto-canibalismo progresista (“Progresista”, entendido desde PROGRESO), pero de esto iremos platicando a medida que vamos tocando otros puntos, para que el que lea esto, entienda el por qué de nuestro actuar de esa manera (Sin buscarle excusas tontas al asunto).
México tiene firmado hoy un contrato con EE. UU. y Canadá, llamado TLCAN (Tratado Libre de Comercio de América del Norte), o sea, el patrón, la patrona, y el niño para que vaya a traer el café y limpie la mesa (El niño es México, por si no lo captó).
Por el mismo TLCAN, los camiones de carga estadounidenses, entran y transitan libremente por todo el mapa mexicano (Como debe ser).
Los camiones de carga mexicanos no pueden entrar a EE. UU., cuando no es por una cosa, es por otra, pero no entran (Y esto es sólo un ejemplo).
El tratado ya tiene 15 años de firmado.
El 85% de las exportaciones mexicanas tienen destino fijado, EE. UU.
Cuando un gringo entra en México, no le piden nada (Papeles de identidad), ni saben que entró.
Cuando un mexicano quiere ir a EE. UU., le piden hasta el certificado de defunción de Pancho Villa, le cobran por adelantado 100 Dólares por una visa que no sabe si se la darán (El 90% de las veces la rechazan), y al final se le quedan con los 100 Dólares, ¿Y de la visa?, ¡¡¡NI MADRES, PENDEJO!!!
Y para que nos vayamos queriendo como buenos vecinos, han construido en la línea fronteriza, más de la mitad de una barda que mide 7 metros de altura, que va a tener más de 3,000 Kilómetros de largo cuando esté terminada, y que tendrá (Tiene ya en los puntos más importantes) radares, cámaras infra-rojas, y todos los adelantos, para detectar a todo pobre que ose andar pidiendo trabajo honradamente, con la excusa de que “todos son narcotraficantes que van a corromperles a sus inocentes nenes que no conocían drogas hasta que a los colombianos y a los mexicanos se les antojó enviciárselos”.
En éste vergel de rosas que es estar pegado con el país más poderoso de la Tierra, México también tiene política, políticos, y elecciones, elecciones a las cuales vamos referirnos.
Antes dije que < “Otra de las razones, es nuestro auto-canibalismo progresista (“Progresista”, entendido desde PROGRESO), pero de esto iremos platicando a medida que vamos tocando otros puntos, para que el que lea esto, entienda el por qué de nuestro actuar de esa manera (Sin buscarle excusas tontas al asunto). >
Bueno, eso voy a hacer: Para empezar, recordaré que un gran latinoamericano, que por lo actuado, sentía mucho por estas tierras, dijo lo siguiente, hace 200 años atrás:
< “En tanto que nuestros compatriotas no adquieran los talentos y virtudes políticas que distinguen a nuestros hermanos del norte, los sistemas enteramente populares, lejos de sernos favorables, temo mucho que vengan a ser nuestra ruina... Estamos dominados de los vicios que se contraen bajo la dirección de una nación como la española, que sólo ha sobresalido en fiereza, ambición, venganza y envidia...” >
< Simón Bolívar >
< Carta de Jamaica del 6 de septiembre de 1815 >
Continúo:
Esta sabia frase de Simón Bolívar, describe con perfección nuestro estado moral al extinguirse el poder del imperio español en éste Continente, y aconsejaba lo que debíamos adquirir del nuevo imperio que se nos montaría en pocos años más, también ignoraba (Por que no leía el futuro) que nosotros adquiriríamos de ellos, lo peor de lo peor de lo que ellos hacen gala, no lo mejor de ellos que Bolívar aconsejaba.
Y es en este estado corrupto-moral, es que nos debatimos en una situación social desesperante, dónde el TODO VALE, funciona hasta para adquirir pan, ni se diga a la hora de elegir nuestros gobernantes.
Todos los que van a votar, saben a ciencia cierta (Sí no son ciegos fanáticos) que votan por cumplir con una obligación moral personal, pero que su voto no significará absolutamente nada en términos de cambios necesarios para bien de nuestro país, para bien del futuro de nuestros hijos.
Todos los que van a votar, saben a ciencia cierta que los que ocupen los puestos mañana, sólo se preocuparán de ver como roban todo lo que más puedan, con la idea de solucionar sus asuntos personales, sin importarles un bledo lo que le prometieron en campaña a su pueblo.
Todos saben incluso, que no ganará las elecciones quien haya conseguido más votos del pueblo, sino, el partido que con anterioridad haya sido elegido por el poder (El imperio, la oligarquía local, la iglesia, y sepa dios quién más), pero no por el votante.
En julio de 1988 se llevo a cabo el fraude electoral mas escandaloso en la historia del país, entonces se elegiría Presidente de la República, el fraude fue ordenado por el gobierno federal encabezado por Miguel de la Madrid Hurtado.
A pesar de que la mayoría de los mexicanos conocen este suceso en la historia de nuestro país, no ha habido intención alguna de llevar a juicio a quienes se apoderaron de las instituciones de forma ilegal y similar a un golpe de estado.
Por estos días que vivimos, el Sr. Ex Presidente Miguel de la Madrid Hurtado, lo ha reconocido a voz en pecho a todo quien lo quiera oír, que “aquello fue un fraude” del cual se benefició su partido, el PRI (Partido Revolucionario Institucional), en contra del PRD, (Partido de la Revolución Democrática).
Pero como no hay primera sin segunda, en 2006 se vuelve a repetir el fraude en elecciones a Presidente, esta vez a favor del PAN (Partido Acción Nacional), y en contra (Otra vez) del PRD (Partido de la Revolución Democrática).
Y es gracias a éste fraude de 2006, que tenemos cómodamente sentado en la poltrona presidencial, a éste espurio genio enano en el nombre de Felipe Calderón.
Alguien que se ha preocupado fehacientemente de convencer a todo el mundo, de que no tiene la menor posibilidad de desempeñar ese puesto con la más mínima dignidad, si no es por medio de un fraude electoral.
Todo esto logrado con el apoyo de los medios periodísticos más importantes (Y no tan importantes) nacionales, que son propiedad de poderosos millonarios oligarcas mexicanos y españoles (Generalmente PRISA), e internacionales, que colaboran para que la derecha no pierda el poder por nada en éste mundo.
Con la colaboración también de maestros en ensuciar campañas políticas en toda América Latina como el español (Ahora mexicano también) Antonio Solá, quien ha trabajado (Y duro) para el PP (Partido Popular) español, y en especial para José María Aznar, y en el equipo de Mariano Rajoy.
Y un estadounidense, dicen que mago en esto de ensuciar elecciones también, Dick Morris (Socio de Solá en éste negocio en muchas elecciones), que no le hace asco a nada ni a nadie mientras le pongan los billetes que él pide, tanto es así que ha trabajado con todo éxito para Bill Clinton, Fernando De la Rúa, George W. Bush, Felipe Calderón, Hillary Clinton, Ignacio Lula da Silva (Por sólo nombrar a algunos), y estos días ha hecho ganar a un verdadero cadáver de la derecha en Argentina, un colombiano llamado Francisco de Narváez.
Esta clase de truhanes son los que meten las manos en las elecciones en México ante un pueblo desentendido totalmente de estas cosas, que no le importa nada de nada, que le da lo mismo votar que quedarse a dormir (Por las razones antes mencionadas).
Un México con 70 millones de pobres, 30 de ellos por debajo del nivel de la pobreza, 20 de ellos con serios problemas de desnutrición, que lo menos que les importa, es saber quien los gobierna, sino qué van a comer más tarde, o si van a poder llevarse algo a la boca más tarde.
En estas condiciones, ¿Alguien podrá pensar cuál es el mejor candidato?, ¿O si le roban las elecciones?, ¡¡¡Por supuesto que no!!!
Este Julio 05, se efectuaron Elecciones Intermedias (Que les llaman), el abstencionismo anduvo por el 60%, ganó el PRI (Partido Revolucionario Institucional), parece que vamos buscando una vuelta a un desgraciado pasado inmediato de 70 años tirados a la basura, 70 años de andar para atrás, pero, “No hay más a quién votar” dice la gente (Qué vota), y como no hay más, hay que votar al que lo jodió por 70 años.
Perdió el PAN (Partido Acción Nacional), el partido de gobierno, partido de extrema derecha, partido que llevará 12 años en el poder cuando termine su mandato, y al cual recordaremos por presentarnos a un Presidente “espurio inútil” que ocupa un cargo que le queda muy grande, y que cuando termine su mandato, retendremos en nuestras mentes por haber vendido todo lo poquito que le quedaba a México cuando entró, que no fue el Presidente del trabajo que prometió ser, sino el que dejó a México con un 25% de desempleo al salir, que fue el Presidente más nefasto de que se tenga memoria al dejar en su camino de 36,000 a 40,000 asesinados (Reconocidos por el gobierno, otros dicen que serán más de 60,000) por la violencia desatada por el Plan Mérida, que no es otra cosa que el mismísimo Plan Colombia puesto en marcha en México, e implantado por los EE. UU.
En fin… un sexenio (Que son dos, con el sexenio de su antecesor Vicente Fox, otro inútil como él, pero buen ladrón) con resultados lamentables, y no por culpa de nadie, sino debido a su inhabilidad para desempeñar el cargo que ocupa, y a su marcada servidumbre (O lacayismo) al servicio del imperio del Norte.
Así funcionan la democracia (“El mejor sistema”) y por ende las elecciones en México, “país libre y soberano”, ¿Podrá ser libre alguien que gana 50 pesos mexicanos al día, mientras un kilo de carne vacuna cuesta 80 de los mismos pesos?, ahí piénsele la respuesta, y después debatimos si quiere sobre elecciones, democracia y libertad.
Transito Guerra Landa.
< “Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad” >
< Simón Bolívar >
No hay comentarios:
Publicar un comentario